A fines de marzo, Indonesia y Qatar firmaron una Carta de Intención sobre asistencia humanitaria y de desarrollo para el pueblo de Afganistán. El acuerdo, que fue firmado por el Ministro de Relaciones Exteriores de Indonesia, Retno Marsudi, y el Ministro de Relaciones Exteriores de Qatar, Muhammad bin Abdurrahman al-Thani, refleja la preocupación y el compromiso de las dos naciones con respecto a la crisis humanitaria que se desarrolla actualmente en Afganistán, especialmente en lo que respecta a la situación de las mujeres y los niños.
Retno también afirmó que la asistencia implica ayuda a largo plazo, incluidas becas y programas de formación profesional adaptados a las necesidades del pueblo afgano, y planes para celebrar diálogos públicos sobre el papel de la mujer en la sociedad afgana.
Junto a esto, Indonesia continúa demostrando su capacidad para buscar construir relaciones con Afganistán para superar la crisis provocada por la toma de poder de los talibanes en agosto pasado, ofreciendo ayuda humanitaria y financiamiento equivalente a $ 2,85 millones en el período de 2022 a 2024.
También en marzo, representantes de Afganistán, Indonesia y Qatar mantuvieron una reunión en Doha para discutir la situación en Afganistán, durante la cual abordaron la grave situación humanitaria, económica y educativa del país. Además de brindar asistencia humanitaria, Indonesia y Qatar también han expresado activamente la importancia de que los talibanes respeten los derechos de las mujeres.
Doha y Yakarta se han comprometido a supervisar el período de transición y han planteado el tema de las crisis humanitarias en los foros internacionales. En su declaración, Retno afirmó que los gobiernos de Indonesia y Qatar estaban listos para supervisar la transición hacia un Afganistán seguro, justo y próspero.
¿Disfrutas de este artículo? Haga clic aquí para suscribirse y obtener acceso completo. Solo $5 al mes.
La colaboración emergente entre Indonesia y Qatar en el tema de Afganistán no es sorprendente. Los esfuerzos de Qatar para establecer relaciones estrechas con los talibanes se basan en el deseo de la nación de fortalecer su posición como mediador regional. Esto corresponde a una de las principales prioridades de la política exterior de Indonesia bajo la administración del presidente Joko Jokowi Widodos.
Al asumir el cargo en 2014, Jokowi dio a conocer nuevas políticas que buscaban mejorar la posición de Indonesia en el escenario mundial. El más importante de ellos fue el esquema de política exterior 4+1 del país, que se refiere al fortalecimiento de la diplomacia económica; diplomacia de protección, soberanía y diplomacia nacional; y el papel de Indonesia en la región y a nivel mundial. El +1 se refiere al fortalecimiento de la infraestructura de la diplomacia.
Este interés común parece haber llevado a los dos países a cooperar entre sí para mediar en la crisis de Afganistán. La invitación de Doha a Indonesia para la reciente reunión también refleja el éxito de Indonesia en generar confianza con el gobierno talibán. Como el país musulmán más poblado del mundo, se considera que Indonesia puede mediar en los conflictos del mundo musulmán, incluido el problema de Afganistán. Además, Qatar también vio el interés de Indonesia en mediar en la crisis del Golfo de 2017.
La identidad islámica de Indonesia también se ve reforzada por su posición neutral, lo que da como resultado que los líderes talibanes de Afganistán tengan más confianza para tratar con Indonesia que con otros países. Esta posición neutral está, por supuesto, de acuerdo con el mandato de la constitución nacional, que dice que el objetivo de Indonesia es fomentar la paz mundial dentro de los contornos de la política exterior libre y activa de Indonesia, que no toma partido en disputas geopolíticas.
Es importante señalar que Indonesia también fue invitada recientemente por China a su primera reunión de países vecinos de Afganistán más Afganistán. Esto implica que la neutralidad y la prominencia de Indonesia en el mundo musulmán han hecho que otros países se interesen en colaborar con él en cuestiones que involucran a otras naciones musulmanas.
Indonesia y Afganistán tienen una larga historia de cooperación. Afganistán fue uno de los primeros países en reconocer la independencia de Indonesia, en 1947, dos años después del comienzo de la lucha del país contra el dominio holandés. Además, Indonesia y Afganistán han cooperado en las áreas de desarrollo de capacidades y lucha contra el terrorismo, y han tenido relaciones económicas modestas pero consistentes. Indonesia es el decimocuarto destino más grande para las exportaciones de Afganistán, mientras que Afganistán es uno de los destinos de exportación más grandes de Indonesia en el Medio Oriente.
En abril de 2017, Indonesia también se convirtió en el primer país del sudeste asiático en recibir la visita directa del entonces presidente afgano, Mohammad Ashraf Ghani, lo que resultó en la firma de un memorando de entendimiento relacionado con la educación, la agricultura, las estadísticas, la reforma burocrática y la política fiscal.
Por último, la cooperación Qatar-Indonesia en los asuntos de Afganistán también está relacionada con los crecientes lazos generales entre los dos. Doha y Yakarta a menudo se reúnen en varios foros multilaterales para discutir temas políticos a nivel regional e internacional. Esto se lleva a cabo junto con la cooperación económica, cultural y de defensa que los dos países han buscado cada vez más.
Por lo tanto, mirando hacia el futuro cercano, es probable que la cooperación entre Yakarta y Doha en asuntos de Afganistán no solo continúe, sino que se expanda a otros temas en el mundo musulmán en general. La clave ahora es cómo las dos naciones extienden esta cooperación más allá de los gestos diplomáticos, no solo para fortalecer sus propios lazos, sino también para traer soluciones del mundo real a Afganistán y más allá.